Se nos acaban los dedos
al contar las bandas de un día que fabricaron hits en serie y
desaparecieron tan rápido como llegaron. La banda de nombre infinito
procedente de Brooklyn parecía pertenecer a este género, pero han
sabido defender su valía y su segundo álbum, Belong, es considerado
como uno de los mejores de 2011 por la publicación Rockdelux.
Con estas credenciales
subieron The Pains of Being Pure at Heart el pasado 13 de enero al
escenario de Razzmatazz 2. Con la sala llena de un público
heterogéneo, el cuarteto supo demostrar su solvencia en directo y
mantuvo a la audiencia en constante estado de entrega en conexión
con la banda. Sí es cierto que la promoción de la banda les ubica
en el territorio incierto de banda a medio camino entre el indie y el
mainstream, y eso se reflejaba en parte del público más preocupada
de hacerse autofotos y gritar que en escuchar a la banda.
Durante los tres primeros temas tuvimos la oportunidad de disfrutarlos de cerca e inmortalizar el momento en un foso atiborrado de fotógrafos, pero supimos ubicarnos el resto del bolo en las últimas filas, donde el espacio y el aire vital algo viciado por la fea costumbre de desconectar la climatización de la sala durante los conciertos, nos permitieron entregarnos a la música y bailar los temas frescos y enérgicos de la banda. Debemos criticar, no obstante, la cortísima duración del bolo, una hora escasa contando los bises. Y grandes muestras de desafinación por parte del cantante, quizá desbocado por la energía.
The pains of being pure
at heart nació el 24 de marzo de 2007, cuando Kip, Alex y Peggy
dieron su primer e improvisado concierto en la fiesta de cumpleaños
de Peggy. Allí descubrieron estos tres amigos, que descubrían la
música intercambiándose cd's y bajando música de Internet,que lo
que querían era crear sus propios temas. Poco tiempo después, Kurt
fue a verles a uno de sus conciertos y se les unió como batería. Lo
que pasó después ya es historia, pero se resume en dos años de
coincidencias y contactos con fans que dirigían sus propios sellos y
que les ayudaron a publicar sus primeras grabaciones. El primer cd,
homónimo, llegó en 2009 y les convirtió en una de las bandas
revelación del año. Sorprendían sus melodías frescas herederas
del pop de los 90 y sus letras, que como el nombre de la banda
indica, hablan del amor y los lamentos del alma a partes iguales. Se
les ha criticado ser un simple refrito de influencias varias. Quizá
quienes lo hacen pierden de vista que el resultado de este refrito es
una banda con personalidad propia que se ha ganado a pulso un puesto
entre los grandes. Como ya se ha escrito, de tocar para tus amigos a
hacerlo junto a tus ídolos hay solo un paso.
Pues no recuerdo haber oído algo de ellos! Ahora mismo me pongo a escucharlos.
ResponderEliminarbss!
...y felicidades por el blog ;)
Hola Javier, acabo de conocer tu blog a través de los premios 20minutos. Andaba buscando un núcleo de gente a los que captar para un proyecto musical, y la lista de los blogs en los premios me ha venido de lujo.
ResponderEliminarMi propuesta es que te unas al foro que he creado junto a unos cuantos compañeros melomanos de la red. Nuestra intención es crear una buena comunidad de personas con intereses parecidos, y desde luego nutrirme de blogeros como yo es un buen inicio.
La dirección es http://45yomusic.comuv.com
Me gustaría mucho contar con tu participación. Si crees que esta fuera de lugar la petición pues borra el comentario como si fuese Spam o similares, no hay problema, pero estoy seguro de que te puede interesar.
Un saludo, y suerte con el las votaciones.
Esta muy bien el blog, no lo conocía hasta ahora, me pasaré más a menudo a leerlo. Aprovecho para felicitarte el 2012, un saludo!!
ResponderEliminarGracias mil por vuestros comentarios, nos animan a seguir adelante con esta aventura tan personal y gratificante. Esperamos veros por aquí de nuevo!
ResponderEliminarSupersoul, echaremos una ojeada a tu foro, por supuesto!